Ejercicios

El comienzo es la parte menos fácil para hacer actividad física. Aunque casi todo el mundo conoce sobre la necesidad de hacerlo, es necesario hallar la motivación adecuada para empezar a hacer ejercicio y continuar haciéndolo.

Todas las personas tienen una razón para hacer ejercicio, aunque para muchos pudiera ser diferente. Algunos se ejercitan por su salud física y otros por su salud mental. Algunos lo hacen para verse bien desde el punto de vista físico. Y otros solo lo disfrutan por el solo hecho de estar activos.

LO QUE DICE LA CIENCIA SOBRE LOS EJERCICIOS

Para quien aspira a vivir más tiempo y con buena salud, el ejercicio junto con una sana alimentación es una prioridad.

Gran cantidad de estudios han demostrado que hacer ejercicio de forma sistemática puede reducir, retrasar e, incluso, prevenir la aparición de ciertas enfermedades que acortan la vida. La diabetes, el cáncer y la demencia son algunas de las más comunes influidas positivamente por el hecho de hacer ejercicio.

Con el propósito de controlar el estrés, el ejercicio regular ayuda al cuerpo a liberar endorfinas. Esta hormona ayuda a reducir el estrés y puede mejorar la serenidad mental. El ejercicio ha demostrado ser un elemento fundamental para mejorar la depresión y la ansiedad.

La Academia Estadounidense de Médicos de Familia impulsa la aptitud física de forma segura y saludable. Esto incluye el ejercicio como una parte esencial de la salud a lo largo de toda la vida y en la prevención de enfermedades, y la participación en deportes recreativos y competitivos.

MOTIVACIONES PARA HACER EJERCICIOS

Cualesquiera sean las razones para hacer ejercicio, determinadas personas están teniendo problemas para empezar, pero existen varios argumentos que pueden utilizarse como motivación de arranque.

Si se desea perder o mantener peso, el ejercicio es de primera importancia. La combinación de ejercicio aeróbico, como correr, bailar y caminar, así como de ejercicio de levantamiento de peso, es especialmente útil en la generación de músculos. Todo lo anterior ayuda al cuerpo a quemar calorías y grasa, y a mantenerse en un peso adecuado.

Hacer ejercicio permite pasar tiempo con amigos y familiares. Y como nuestro clima es agradable, practicarlo en la casa o al aire libre no cuesta ningún dinero. Las actividades tales como caminar, correr, ciclismo, tenis, baloncesto y fútbol son buenas formas de ejercitarse en grupo y más ahora en tiempos de apertura. Estas actividades también pueden provocar risa, lo cual es importante para la salud mental.

MOTIVACIONES PARA COMENZAR

Para empezar a hacer ejercicio y continuar con el mismo se aconseja instaurar metas razonables. Quien está comenzando debe planificar hacer ejercicios durante 20 minutos 3 veces a la semana y empezar desde allí, anotando su progreso, bien sea para comprobar índice de masa corporal, peso, talla de la ropa o estado de ánimo, realizando un seguimiento para ver si está mejorando.

Se debe intentar hacer ejercicio de forma periódica, pero no hay que sentirse culpable si un día de trabajo extra hace que no se pueda realizar una sesión de ejercicio.

OTRAS MOTIVACIONES

El tiempo de ejercicio debe dedicarse a uno mismo porque quien trabaja duro todos los días merece cuidar de su cuerpo y de su mente para su propio beneficio y haciendo el ejercicio que le resulte más divertido.

Una misma rutina de ejercicios puede llegar a ser aburrida, y por eso se debe planificar hacer diferentes tipos de ejercicios, alternándolos por día, por semana o por mes y haciendo que funcione de manera entretenida.

Es recomendable cambiar los almuerzos pesados por alimentos ligeros y nutritivos, y en el tiempo ahorrado ponerse a hacer ejercicio en la propia casa o, incluso, en el centro de trabajo, al usar las escaleras en lugar del elevador.

Sería deseable despertarse 30 minutos antes una o dos veces a la semana para realizar los ejercicios de un tirón, sin pensar en los fracasos del control del peso y los ejercicios dejados de hacer en el pasado, pues lo más inteligente es mantenerse enfocado en lo que se quiere lograr en el futuro.

LOS EJERCICIOS Y LA MEDICINA

Aunque el ejercicio es bueno, la mayoría de las personas con enfermedades crónicas deben hablar con su médico antes de comenzar una rutina de ejercicios, siendo válido para personas con enfermedades cardíacas y otras enfermedades crónicas. Siempre es bueno a cualquier edad consultar con el médico de la familia para obtener su criterio sobre el tipo y el nivel de ejercicio que debe seleccionar con relación a la edad y capacidad física, analizando las actividades que puedan ser demasiado para la edad y la capacidad. Por ejemplo, la práctica de deportes de equipo, como el baloncesto, podría ser más difícil para un cuerpo a medida que envejece.

Otras motivaciones para hacer ejercicio son que, si no puede o desea pagar un gimnasio privado, buscar alternativas menos costosas. Esto podría incluir centros de recreación, un parque seguro o engrasar la vieja bicicleta y ponerla a trabajar.